Año tras año, mayo nos presenta un escenario marcado por una suerte de populismo y poca seriedad para enfrentar el tema del reajuste al salario mínimo.
La celebración del “Día del trabajo” sirve como tribuna para políticos y dirigentes que parecieran buscan aprobación y popularidad, antes que ganas de hacer un esfuerzo por presentar una propuesta que institucionalice y cree un mecanismo que regule todos los años este reajuste. Sin duda estos llamados obvian tanto el buen panorama en que nos encontramos como país, como los malos índices de empleabilidad que viven otros países, y pueden llegar a inducir malos resultados.
Nuestra ministra del Trabajo nos ha enviado un correcto mensaje al señalar que es necesario cuidar los empleos que se han creado, los que a pesar de los pronósticos de los mas escépticos, han aumentado en más de 700 mil durante este gobierno. Debemos tener cuidado en el debate. Lo ético hoy es asegurar que cada familia tenga un ingreso mínimo que sirva como piso para vivir su vida con dignidad, cuidando no perjudicar la empleabilidad, ya que por querer jugar con colores populistas, podemos dejar fuera del sistema a muchos, especialmente a los más pobres y con menor calificación. La propuesta para abordar esto con la seriedad necesaria, consiste en institucionalizar un mecanismo ordenado que trabaje sobre la base de criterios objetivos y técnicos, acotando así el marco de acción política, un rayado de cancha. El desafío es encontrar un mecanismo para institucionalizar y acotar el salario mínimo.
En años anteriores se ha discutido en la comisión de salario mínimo, en la comisión de hacienda y con organizaciones de trabajadores como la CUT, diversos criterios y propuestas para el reajuste del salario mínimo de cada año. Buscando dar una solución a este debate político anual, parlamentarios hemos planteado la idea de institucionalizar el debate, creando un mecanismo que regule a partir de ciertos criterios el reajuste al salario mínimo.
A continuación tres criterios centrales que debieran ser parte de un nuevo marco institucional para estos temas: 1. Inflación: el reajuste debiera considerar la variación anual de la inflación, ya sea pasada o futura (siempre usando la misma), de forma tal de mantener el poder adquisitivo de las personas. 2. Productividad: la modificación del salario mínimo debe incorporar la variación anual de la productividad. Sin duda que aumentos en la productividad media (u otra medida) debieran reconocerse también en la modificación del salario mínimo. Si la productividad decae, aumentar más allá de la inflación no sería una buena decisión. 3. Contexto macroeconómico: la realidad económica nacional e internacional, en términos de niveles de empleo, crecimiento, y otros, debe ser incorporado como elemento relevante en el análisis y en la decisión.
Los próximos dos meses van a estar marcados por el cambio. Ya están en discusión la reforma tributaria, la reforma educacional y el reajuste al salario mínimo. El llamado es a ser responsables frente a la discusión del salario mínimo de los trabajadores chilenos y a buscar un mecanismo institucionalizado que deje las aspiraciones mediáticas de algunos de lado y privilegie buenas decisiones para el país.
Sin duda todos quisiéramos que el salario mínimo fuera mayor, pero no debe ser sólo el deseo sino la convicción de tomar buenas decisiones lo que nos debe orientar en los meses que vienen.
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PREOCUPA QUE LA REFORMA NO TENGA INCENTIVO ESPECÍFICO PARA LAS PYMES
-Nos preocupa que un aumento del impuesto a todos los emprendimientos de Chile no venga acompañado con un incentivo específico para las pymes. Estamos analizando la posibilidad de pedirle al gobierno que aumente los montos que hoy día limitan el uso del beneficio del 14 quáter para la reinversión de utilidades sin pago de impuestos y también, que se analice la posibilidad de cambiar los requisitos, por ejemplo, no exigir que tengan que usar contabilidad completa.
-¿Van a condicionar el apoyo de este artículo a lo que piden?
-Tenemos que ver cómo se da el debate. El gobierno ha escuchado mucho de lo que ha planteado la UDI, lo vemos en la rebaja, en el tema combustibles. Por eso queremos discutir con el gobierno este punto, escuchar sus argumentos, antes de tomar una posición definitiva.
-¿Qué destaca de la propuesta?
-El proyecto contempla una serie de perfeccionamientos tributarios que en la práctica vienen a implicar un aumento de la carga tributaria neta.
-Se propone el fin a los retiros en exceso del fondo de utilidades tributables…
-El gobierno está proponiendo que el tratamiento de los retiros sea equivalente en las sociedades limitadas a como es en las sociedades anónimas. Acá hay diferencia entre lo que se produce con las utilidades financieras y las utilidades tributarias, porque llevan un registro de contabilidad diferente y lo que pagan las empresas es un anticipo del impuesto que pagan las personas; y las personas pagan sus impuestos cuando hacen el retiro y por lo tanto, en la medida que no se hayan retirado a nosotros nos parece bien que no tengan que pagar impuesto. Ese principio nos parece positivo porque lo promueve es haya ahorro, inversión y que mantengan los recursos de las empresas. Lo que está haciendo esta medida es ordenar este tratamiento para asimilarlo a las anónimas.
Fuente: Diario Estrategia
«SESIONES PARA DEBATIR REFORMA TRIBUTARIA DEBIERAN SER TELEVISADAS»
Diputado propone que la instancia escuche a especialistas extranjeros durante la primera fase de la tramitación del proyecto.
Su presidente, el diputado UDI Ernesto Silva, es uno de los parlamentarios que más de cerca ha seguido la génesis de la propuesta y, a la vez, uno de los que más reparos ha planteado.
– ¿Qué evaluación hace del proyecto de reforma tributaria?
-Es un proyecto que contiene un conjunto de rebajas, que son muy positivas y espero que se aprueben en el Congreso. También valoro el contenido de la reforma educacional propuesta por el Gobierno. Pero miro con menos entusiasmo el alza de impuesto a todo emprendimiento en Chile, porque no es efectivo que sea un alza de impuesto sólo a las grandes empresas (del 17% al 20%). A nosotros nos preocupa que se le haga más pesada la mochila a los pequeños y medianos emprendedores.
«Hubiera preferido no abrir la discusión»
-¿Y qué opinión tiene sobre el proyecto que mitiga el alza de los combustibles?
-Estamos muy contentos con que el Gobierno haya escuchado a la UDI. Nosotros vamos a conocer mañana (hoy) el contenido específico, pero entendemos que tiene dos modificaciones centrales: la primera apunta a cambiar los parámetros para determinar el precio de referencia, y segundo modificar el ancho de la banda. Sin embargo, al igual que el senador Jovino Novoa, hubiera preferido no abrir esta discusión tributaria porque con la Concertación, que ha mostrado diferencias profundas con nosotros, no sabemos qué saldrá del Congreso.
-¿Cuál es el cronograma de trabajo en la comisión?
-Dependiendo de la urgencia que le dé el Gobierno, vamos a ver la urgencia que le pondremos nosotros. Espero que podamos iniciar en los próximos días la discusión del proyecto de los combustibles, y eventualmente mañana (hoy) la discusión de la reforma tributaria. En ese sentido, voy a proponer a la comisión que podamos sesionar sobre estos temas en Santiago los lunes por la tarde y los martes en el Congreso, de modo que la sesión del miércoles sea para los otros proyectos, el de la ley que regula las Isapres, el que modifica la ley reservada del cobre, el de donaciones para fines culturales, entre otros varios más. Además, voy a proponer que la mayoría de las sesiones sean televisadas para que sea una discusión abierta a la ciudadanía, y que podamos invitar a un número relevante de expertos a la discusión
-¿Como quiénes?
-Por ejemplo propondré invitar a representantes de países que han hecho cambios tributarios en el último año, como algún experto de Canadá, que ha decidido bajar los impuestos a las empresas; o alguien del gobierno de EE.UU. que explique lo que ha hecho Barack Obama al proponer bajar los impuestos al emprendimiento; o personeros del gobierno de Brasil para conocer los planes de restructuración de ese país. No obstante, el debate por lo pronto se inicia con la exposición del ministro de Hacienda, Felipe Larraín.
-¿Cuáles son los plazos que se manejan? En La Moneda habría interés de que, al menos el proyecto de los combustibles, esté listo antes del 21 de mayo.
Queremos avanzar en el debate con profundidad y velocidad. Yo tiendo a pensar que el proyecto de combustibles no debería tomar más de dos semanas en la Cámara, porque tiene poco articulado y es sencillo de debate. En la reforma debiera tomar al menos mayo y una parte de junio. En la comisión primero hay una discusión general y se vota la idea de legislar, y luego se debate en particular, donde se ve artículo por artículo.
«Estoy en desacuerdo con alzas»
-A su juicio, ¿qué le faltó incluir al Gobierno en ambos proyectos de ley?
-El test con lo que queremos evaluar el tema de los combustibles es conocer el impacto real en el precio. Nuestra medida era que el impuesto fuera móvil, en base a un precio de referencia absoluto y no movible, de manera que si se superara cierto umbral, el impuesto se fuera a cero. En la reforma tributaria, por su parte, estoy en desacuerdo con las alzas, porque existen otras formas de financiar la reforma educacional, donde se cuida más el crecimiento económico y el emprendimiento. Por ejemplo nos hubiese gustado la existencia de un fondo a 20 años para preocuparnos de una generación completa en materia educacional, con endeudamiento y con recursos aportados del Tesoro Público. Chile tiene un nivel de endeudamiento muy bajo y podría ser capaz de adquirir uno a largo plazo.
Además, estoy muy de acuerdo con las rebajas, pero nos hubiera gustado ver que se pudiera corregir la inequidad que hace que los fondos de pensiones de los chilenos no puedan usar como crédito el impuesto pagado por los dividendos de las acciones. Y me preocupa en especial la situación de las Pymes, porque queríamos más beneficios de reinversión de utilidades sin pago de impuestos.
-¿La UDI debiera dar apoyo incondicional a la reforma, tal como lo ha pedido el Gobierno a los partidos oficialistas?
-Nosotros vamos a apoyar la idea de legislar, pero vamos a analizar en su mérito las medidas. Tenemos mucho por debatir en los perfeccionamientos.
Fuente: Diario El Mercurio
Reforma tributaria: cómo reciben la propuesta los parlamentarios
Ernesto Silva, diputado UDI y presidente de la comisión de Hacienda
«Es un avance importante que el gobierno se haga cargo del tema de los combustibles, pero nos sigue preocupando que se le suban los impuestos a todos los emprendedores de Chile. Valoramos que se bajen los impuestos a las personas y que se permita descontar de los impuestos gastos de las familias en educación. Tiene muchos aspectos que debemos analizar en su mérito. Veo con mucha preocupación el debate que vamos a tener, porque está al frente la propuesta de la Concertación de US$7.000 millones. Estoy abierto a la idea legislar, pero eso no asegura que yo amarre mis votos en los otros temas».
Fuente: Estrategia
Diputados UDI ante modificaciones a impuesto a los combustibles: “Más que un triunfo para la UDI, es un triunfo para el país”
Luego de reunirse con el Presidente Piñera para conocer los detalles de la reforma tributaria, los parlamentarios gremialistas agradecieron el hecho que el Mandatario “dio respuesta a nuestras inquietudes y decidió incorporar modificaciones que permitan disminuir el precio que los chilenos pagan por los combustibles”.
A las 16.00 horas, el Presidente de la República, Sebastián Piñera, recibió a los jefes de bancada de la UDI y RN, además de los diputados oficialistas que integran las comisiones de Hacienda y Educación, con el fin de detallar los contenidos de la propuesta de reforma tributaria que esta noche dará a conocer en cadena nacional.
Uno de los aspectos más comentados durante las últimas semanas ha sido la ofensiva UDI en torno a que Piñera incluyera algún mecanismo que atenuara el impacto del impuesto específico en los precios de los combustibles. Y tras la cita, el jefe de la bancada gremialista, Felipe Ward, celebró que el tema haya sido considerado.
“Nos satisface saber que el Presidente dio respuesta a nuestras inquietudes y decidió incorporar modificaciones que permitan disminuir el precio que los chilenos pagan por los combustibles”, dijo.
Ward hizo hincapié en que “más que un triunfo para la UDI, este es un triunfo para el país, para la clase media, las pymes, los colectiveros, los taxistas, los feriantes, que semanalmente sufren las alzas en los precios de las bencinas y veían que el sistema no funcionaba como se esperaba. Aquí veremos una ayuda directa al bolsillo de los chilenos”, aseveró.
De acuerdo a lo informado por el Jefe de Estado, la totalidad de la recaudación que el país obtenga –alrededor de US$ 700 millones- se destinará a educación, hecho que la diputada María José Hoffmann destacó diciendo que “el 2011 fue el año de las movilizaciones; éste debe ser el año de las soluciones, y junto con las propuestas que el Ministerio de Educación está llevando a cabo, el Presidente nos dice hoy día que contaremos con mayores recursos para nuestros estudiantes. Esa es una señal importantísima hacia el país y una muestra del compromiso de nuestro Gobierno con una educación de calidad para todos”.
Mientras, el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara, el UDI Ernesto Silva, destacó que “esta reforma contiene diversas propuestas que hemos hecho en la línea de disminuir impuestos a las personas, junto con la necesidad de cuidar el crecimiento y el empleo. Esperamos que la Concertación sea responsable, de manera que el proyecto que finalmente salga del Congreso nos permita seguir creciendo y seguir generando puestos de trabajo, y no se coarte el dinamismo que nuestra economía tiene”.
EL LIBRETO TRAS LA IRRUPCIÓN DE LA NUEVA GENERACIÓN UDI EN LA PRIMERA LÍNEA
Estratégica, y a veces hasta coordinadamente, lograron permear la estructura de poder gremialista, y hoy ocupan lugares en la Cámara de Diputados, cargos en la directiva UDI e influyentes lugares en el Gobierno.
En el Congreso, algunos de sus representantes son María José Hoffmann (35), Javier Macaya (33) y Arturo Squella (33) y Ernesto Silva (36), el único que conoció a Guzmán.
En el Gobierno destacan Pablo Terrazas (34) y Juan Antonio Coloma (32), quienes ocupan el cargo de jefe de gabinete de dos influyentes ministros: Andrés Chadwick y Laurence Golborne, respectivamente. En la Fundación Jaime Guzmán -el referente de la mayoría de los sub 40-, está posicionado Jaime Bellolio (31).
Todos tenían entre 12 y 15 años cuando murió el fundador de su partido, y estaban lejos de dar sus primeros pasos en política.
Los que llegaron al Congreso, lo hicieron sin golpear la puerta, apostando el todo o nada para las parlamentarias del 2009. Y lo consiguieron. Ahora, a casi tres años de esa incursión, entraron de lleno a las grandes ligas, algunos a cargos clave en comisiones económicas y otros, hace dos semanas, a la nueva directiva del partido.
El principio: la UC y la Fundación Jaime Guzmán
La historia dice que el grupo de los parlamentarios tiene mucho en común. Todos, salvo Hoffmann, pasaron por los pasillos de Derecho en la Universidad Católica, y en su mayoría volvieron a encontrarse años más tarde en la Fundación Jaime Guzmán, donde varios de ellos -como Macaya, Terrazas y Squella- formaron parte de su programa «Jóvenes al Servicio de Chile», trabajando en municipios a lo largo del país.
La mayoría también entró tarde a la UDI, casi todos después del 2000. Pero su cercanía no sólo se trata de afinidad política, sino también de amistad –Silvay Squella, por ejemplo, acostumbran juntarse a comer en sus casas- e incluso de lazos familiares, como el caso de Hoffmann con Coloma -hijo del ex timonel gremialista del mismo nombre-, de quien es cuñada. Así, pese a no tener una mecánica de reuniones periódicas, funcionan bajo una lógica de equipo. Este año, Silva y Macaya -quien encabeza la comisión de Salud de la Cámara- tomaron las riendas en el área tributaria, el primero como presidente de la comisión de Hacienda de la Cámara y el segundo a la cabeza del equipo económico del partido, mientras que Squella entró de lleno a temas políticos y de seguridad en la comisión de Constitución y como representante del comité electoral del partido. Y el año pasado, Hoffmann presidió la comisión de Educación, en plenas movilizaciones estudiantiles.
«Tenemos que hablar fuerte»
Su protagonismo en áreas clave del Congreso durante su primer período parlamentario, les permitió dar el salto para entrar a la mesa UDI, con Patricio Melero. El sentido de integrarlos, dice el timonel gremialista, «es ir preparando a quienes a futuro tendrán la misión de conducir los destinos del partido», y eso no es gratis. «Los cargos en la UDI no se obtienen por influencias o padrinos. Se trata de una combinación de disponibilidad al riesgo y no encontrar sandías caladas por amistad», resume Melero.
El presidente UDI no fue el único que jugó un rol en el desembarco de esta generación al «área chica» (lo hizo, en particular, con la incorporación de Hoffmann a la mesa). En el partido todas las voces apuntan al rol que jugó el diputado José Antonio Kast en el trabajo para reclutar jóvenes para las parlamentarias 2009. Y ahora fue él mismo, como secretario general, quien propuso a Bellolio para integrar la nueva directiva.
También se apunta al vínculo con Rodrigo Alvarez -de hecho, su renuncia al ministerio de Energía golpeó fuerte al grupo- y, en ciertos casos, con los «coroneles». Así fue, al menos, con Macaya, a quien el ministro Chadwick -profesor universitario suyo- impulsó a ser candidato en la Sexta Región.
Del emblemático grupo fundador, es con la figura de Jovino Novoa, quien lidera el rechazo a una reforma tributaria, con quien se sienten mayormente identificados, aunque también resaltan el liderazgo interno de Pablo Longueira.
«Si pudiéramos generar un Jovino Longueira sería impecable», dice Macaya. Ante eso, Squella agrega que «me gusta la manera en que Jovino Novoa defiende nuestras ideas».
Esa ha sido, de hecho, la postura que en su mayoría han tomado ante la discusión de un ajuste en los impuestos. Esta semana, todos ellos aprobaron el proyecto de acuerdo que la UDI realizó en apoyo a una baja del gravamen a los combustibles y otros, como Silva, aseguraron que están dispuestos a rechazar la propuesta que emane del Gobierno.
Conforman el «núcleo duro» del rechazo a esta iniciativa, y en eso, dicen, no tienen miedo de levantar la voz. Silva sostiene que «no me gusta una reforma con ideas de otros, menos pretender que los problemas de la educación se resuelven subiendo impuestos. Tenemos que hablar con nuestras ideas y hablar fuerte, dejar atrás los complejos». Squella agrega que «el Gobierno se equivoca en plantear un alza de impuestos de primera categoría», y Macaya remarca que «si finalmente lo que votamos se convirtió en algo contrario a lo que pensamos, no tengo duda que está dentro de las posibilidades que votemos en contra». El Presidente anunciará el contenido del proyectoa fines de abril.
Ante la presidencial… Pragmatismo
Entre las definiciones más importantes para los próximos dos años, la que más marcará el posicionamiento de estos diputados será su rol en la campaña presidencial. Si el consejo general de la UDI hace dos semanas dejó la puerta abierta para que el partido respalde a un candidato independiente, este grupo es pragmático, pero extremadamente cuidadoso de no ponerle nombre y apellido a esa figura.
«Nuestro óptimo es que sea alguno de los que históricamente ha estado en la UDI, sin ir más lejos Pablo Longueira, pero siempre abiertos a que quien represente las mejores ideas sea el candidato», dice Squella, y agrega que «si Pablo o cualquier otro candidato no logra acercarse más a la posible candidata de la Concertación, que es Michelle Bachelet, uno tiene que ver quién es más competitivo». Eso sí, remarca que «considerar una primera vuelta como una primaria sería un error para la Alianza».
En el caso de Silva, éste afirma que «la UDI tiene que tener un candidato propio», que debe ser definido después de las municipales de octubre, ya sea un militante o simpatizante. Por su parte, Macaya plantea que «la UDI tiene que llevar un candidato, pero no necesariamente tiene que ser militante». A su juicio, «la presidencial hay que correrla para ganarla, no para hacer un voto testimonial». Hace dos semanas, Hoffmann dijo en una entrevista a este medio que «no hay nadie en la UDI que no prefiera que sea un militante de nuestras filas, pero también hay personas con apoyo popular importante que hay que considerarlas».
Conservadores en lo valórico
Pese a ser la camada más joven de la UDI varios se definen conservadores en temas valóricos, los más sensibles para el partido. A mediados del año pasado, los cuatro diputados firmaron, junto con la mayoría de la bancada del partido, un documento que fue enviado al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, cuestionando duramente el manejo del Gobierno en la regulación de las uniones de hecho, cuando se debatía sobre el Acuerdo de Vida en Pareja.
Así «mostraron los dientes» en la agenda valórica. «Defendemos la fortaleza de la familia, creemos en la vida. Nosotros estamos en política para defender ideas y principios, no para andar calculando qué nos conviene decir», dice enfático Squella. En ese sentido, añade que «las medias tintas en temas de fondo, como los valóricos, no van con uno». Macaya, a su vez, se reconoce conservador en lo valórico. «No estoy abierto a discutir el matrimonio homosexual, pero no tengo problemas con que se regulen las uniones de hecho y sus efectos patrimoniales».
La definición presidencial de los «Sub 35» en el Gobierno
Juan Antonio Coloma Alamos (32), hijo del ex presidente de la UDI, tuvo su prueba de fuego en las parlamentarias de 2009 en el distrito 11. Perdió por unos 400 votos, lo que significó un golpe duro, pero dio vuelta la página de inmediato, y sólo dos meses después conoció a Laurence Golborne en el Ministerio de Minería, donde fue jefe de gabinete del subsecretario Pablo Wagner.
La sintonía fue rápida, y el mismo ministro le pidió irse con él a Obras Públicas apenas se enteró de su cambio de cartera.
En el MOP, Coloma se desempeña como jefe territorial, lo que lo lleva a estar en regiones y en la calle con el ministro. «Uno ve un cariño de la gente que hace rato no se veía. Me recuerda mucho la campaña de Lavín el `99 y esa efervescencia», dice el abogado, que también estudió en la UC y se considera conservador.
La cercanía con Golborne también le abre espacio para jugarse por una eventual candidatura presidencial del titular del MOP. «El ha demostrado que es mucho más que el tema de los mineros», afirma, y agrega que «si llegada la hora de las definiciones dentro de lo que la UDI decida él es (el elegido), yo encontraría que sería un gran nombre para que fuera el candidato de la UDI». No sólo eso, porque para Coloma, su jefe «sería un gran Presidente». En ese sentido remarca que su partido debe ser pragmático pese al especial afecto que hay con Longueira.
En una postura contraria, Pablo Terrazas (34), jefe de gabinete del ministro Andrés Chadwick, considera que «el partido tiene que llevar un candidato propio, al mejor posicionado, y ése hoy día es Pablo Longueira».
Terrazas -que representó al gobierno en las negociaciones en Aysén- entró hace casi 10 años a la UDI y en las dos elecciones internas dividió sus apoyos. En la primera estuvo con Kast y luego con Coloma.
En el caso de Jaime Bellolio (31), su ingreso a la directiva fue de la mano del secretario general, quien lo propuso para el cargo. El ex presidente de la FEUC pasó antes por la Fundación Jaime Guzmán, y tiene especial admiración por el trabajo de Jovino Novoa, el propio Kast y Rodrigo Alvarez. Hace dos semanas en una entrevista con «La Segunda» planteó que en materia presidencial «quien interprete mejor las ideas de la UDI» contará con su respaldo.
Autor: por: Por Tomás Martínez, La Segunda
Cuidemos la transparencia
«…Los derechos constitucionales son un límite irrebasable y no puede permitirse que miles de funcionarios públicos sean privados sin más de la protección que ellos les brindan a todos…»
Lamentablemente, la reciente resolución del Consejo para la Transparencia, que obligaría a revelar los correos electrónicos enviados y recibidos por un ministro de Estado, en vez de contribuir a consolidar o perfeccionar unas normas y mecanismos que estaban funcionando apropiadamente, los pone innecesariamente en tensión, pues abre la puerta tanto al desconocimiento de derechos constitucionales como a un entorpecimiento indeseable de las labores de la Administración del Estado.
Al revés de lo que sugería Carlos Peña en su última columna, las autoridades y funcionarios del Estado son ante todo personas, que gozan en plenitud de los derechos que la Constitución garantiza a éstas. Entre esos derechos se cuenta la inviolabilidad de toda comunicación privada, dentro de la cual nuestra doctrina jurídica y jurisprudencia incluyen a los correos electrónicos y a las conversaciones telefónicas. Y, aunque la Constitución admite que las leyes fijen excepciones en la materia, no hay en nuestro ordenamiento jurídico ninguna disposición legal que de modo específico y determinado configure una excepción en que pueda fundarse una resolución como la adoptada por el Consejo para la Transparencia.
Carlos Peña sostiene que, mientras una autoridad esté sentada en su oficina y use bienes públicos, todo lo que diga o haga puede ser objeto de escrutinio. Pero eso equivaldría a someter a todos los funcionarios públicos a una suerte de control orwelliano. ¿Sería entonces legítimo intervenir también sus conversaciones telefónicas o instalar cámaras y micrófonos en sus oficinas para que todo lo que digan y hagan pueda quedar efectivamente sometido a ese escrutinio público? Tal cosa equivaldría a tratar a los funcionarios públicos antes como villanos que como ciudadanos. Y eso no fue ciertamente lo que tuvieron en mente quienes intervinieron en la dictación de la Ley sobre Acceso a la Información Pública. La confianza en las personas y el sentido de la ética son, a fin de cuentas, los pilares fundamentales para el buen funcionamiento de las instituciones democráticas.
Los derechos constitucionales son un límite irrebasable y no puede permitirse que miles de funcionarios públicos sean privados sin más de la protección que ellos les brindan a todos. Pero una decisión como esta podría, además, entrabar injustificadamente el funcionamiento de la Administración. Es muy importante que sepamos cómo se usan los recursos públicos, qué decisiones adoptan los órganos del Estado y cómo las fundamentan. Pero no siempre será conveniente o necesaria la publicidad del proceso completo de deliberación previo a esas decisiones. Los órganos del Estado tienen, por definición, que actuar estratégicamente respecto de los distintos grupos de interés a los que afectan sus resoluciones. Por lo tanto, si las autoridades fueran obligadas a exponer todas sus conversaciones que hacen parte de esos procesos deliberativos, quedarían en una peligrosa situación de asimetría respecto de esos grupos de interés. No todo lo que no es susceptible de publicidad es injusto, como sentencia Carlos Peña; muchas veces, no es ese el caso.
Por otra parte, se señala que las autoridades podrán seguir contando con su correo privado. Quienes lo afirman parecen contentarse con la que, sin duda, sería la consecuencia futura de una resolución como la que comentamos: la de unos funcionarios hipócritas, que usan sus correos oficiales para contenidos inocuos y realizan sus legítimos procesos de deliberación tras el cobijo de sus correos privados. ¿Tiene eso algún sentido?
Adicionalmente, la interpretación de la ley realizada por el Consejo puede incluso afectar materias de alta trascendencia estratégica, como la defensa nacional o las relaciones internacionales. Hoy día son los correos electrónicos de un ministro de Estado, pero mañana podrían ser los de nuestro embajador en La Haya, nuestro embajador en Lima o nuestro cónsul general en Bolivia.
No es que no haya que seguir avanzando en materia de transparencia, incluso en lo que toca a comunicaciones de las autoridades y funcionarios públicos, como sus correos electrónicos. Pero en ningún caso puede procederse de un modo tosco, que amenace el buen funcionamiento del Estado en vez de favorecerlo, ni menos que infrinja las normas de la Constitución. Todo perfeccionamiento debería ser objeto de una discusión en profundidad, que termine plasmándose en normas legales claras y razonables, que nos permitan a todos saber con nitidez a qué atenernos.
Fuente: El Mercurio
«ESTOY DISPUESTO A VOTAR EN CONTRA DE UN MAL PROYECTO»
Como integrante de la comisión económica de la UDI, el diputado Ernesto Silva tendrá un rol clave en la cita que miembros de esa instancia tendrán con asesores de Hacienda para analizar el proyecto de reforma tributaria. En el encuentro -explica Silva– el partido buscará tratar de «convencer» al Ejecutivo de la inconveniencia de aplicar un alza de tributos.
Usted es contrario a la reforma. ¿Qué le parece que algunos parlamentarios muestren apertura a aprobarla?
No tiene ningún drama que haya diversidad de opiniones ante un proyecto que todavía no se conoce. Por eso, encuentro legítima la posición del senador Novoa u otros, que han planteado fuertes reparos, así como personas que puedan plantear su visión a favor. Pero creo que tenemos que conocer bien el proyecto antes que entre, además de tratar de influir en el gobierno a partir de nuestras ideas.
¿Usted mantiene su posición?
Estoy dispuesto a votar en contra de este proyecto, si termina mal. Estoy dispuesto a votar en contra de una mala reforma tributaria. Espero que podamos convencer al gobierno de que subir los impuestos no es la mejor forma para abordar el desafío educacional. En ese marco, tiene mucho valor que se inicie ahora un trabajo conjunto con el gobierno para analizar el contenido específico.
¿Tiene que haber libertad de acción, como planteó en su momento el senador Novoa?
Siempre hay libertad de acción. Lo que corresponde ahora es que los diputados y senadores puedan reflexionar y analizar lo que se va a plantear.
El presidente de la UDI les pidió lograr una postura unitaria, ya sea a favor o en contra…
Yo también espero que tengamos una postura unitaria, pero no veo mayor dramatismo en que en un proyecto de este tipo pueda haber libertad y diferencias a la hora de votar.
Si no se adopta una postura común, ¿podría perjudicar al partido?
Creo que el gobierno debe promover proyectos en que exista consenso en la Alianza. Hay que ser muy cuidadosos en proyectos que no son parte del programa de gobierno, que no son previamente consensuados.
“Necesitamos profundizar la relación de la Cámara de Diputados con el Banco Central”
El presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara lideró un encuentro de la instancia parlamentaria con el titular del ente rector, Rodrigo Vergara, para conocer aspectos relacionados con el proyecto que aumenta cuotas de Chile en el FMI.
Por cerca de una hora estuvieron reunidos los consejeros del Banco Central (BC) con los miembros de la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, instancia que preside el diputado UDI Ernesto Silva. ¿La razón? Conocer detalles del proyecto de ley que autoriza al BC a suscribir un aumento de cuotas en el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sin embargo, el diálogo fue más allá y, según detalló el diputado Silva, “planteamos la necesidad de profundizar las relaciones entre el Banco Central y la Cámara de Diputados”.
En este sentido, el presidente de la Comisión de Hacienda valoró la disposición expresada por el titular del BC, Rodrigo Vergara, para fortalecer el vínculo que existe entre esta entidad y la Cámara de Diputados, “especialmente en un contexto donde los tratados internacionales y los compromisos internacionales que adquiere Chile son cada vez más relevantes y vinculantes”.
En otras palabras, Silva puntualizó que “en Chile los tratados internacionales cada vez implican mayores compromisos para el país, lo que no se limita sólo a materias financieras internacionales, como con el FMI, sino muchos otros ámbitos. Así, la decisión política final siempre está en el Congreso; sin embargo, muchas veces no disponemos de la información oportuna para formarnos un juicio propio. Ahí hay un desafío que no se reduce a un proyecto de ley, sino a cómo pensaremos esos temas hacia adelante”.
De esta forma, Silva sostuvo que “existe la necesidad de disponer de mejor información por parte de la Cámara de Diputados, y tener un trabajo más fluido con el BC”. Y añadió: “Creemos que en la actualidad hay un vínculo demasiado tenue entre lo que hace el Banco Central y la tarea que cumple la Cámara”, situación que fue planteada a los consejeros del ente rector y que tuvo buena acogida.
El legislador de la UDI tomó como ejemplo de trabajo la reciente creación de una comisión mixta de Relaciones Exteriores y el Informe de Política Monetaria que expone periódicamente el propio BC ante el Senado, ambas instancias que permiten conocer con mayor profundidad información relevante a la hora de legislar.
Respecto del proyecto de ley que ha enviado el Ejecutivo para aumentar las cuotas de participación del Banco Central de Chile en el FMI, Silva dijo que “me parece un buen proyecto que, planteado de la forma en que se explicó, incluso permite aumentar los derechos de voto de Chile en el FMI, lo que en escenarios de incertidumbre es sumamente positivo”.
Silva (UDI) afirma que cifras de desempleo “demuestran nuestra gran diferencia con la Concertación”
Para el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara, la información que esta mañana dio a conocer el INE es “una gran noticia para las familias chilenas”.
Fue un compromiso de campaña y, en los dos años de gobierno del Presidente Sebastián Piñera, se ha sobrepasado la meta impuesta respecto de la creación de empleo. Así lo demuestra la información entregada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) este viernes, que cifró el desempleo para el trimestre diciembre-febrero en 6,4%, registrando así una disminución de 0,2 punto porcentual.
Para el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, diputado UDI Ernesto Silva, “esta nueva baja en la cifra de desempleo constituye el sello de la UDI popular en el gobierno y la preocupación que nuestro gobierno ha tenido por darle mayores oportunidades a las familias chilenas”.
Silva destacó que “la disminución del desempleo demuestra nuestra gran diferencia con la Concertación; hay un cambio en la forma de abordar la desigualdad, basado en darle oportunidades a las personas a partir de empleos y empleos dignos”.
En este sentido, el parlamentario gremialista afirmó que “las cifras que hemos conocido son una gran noticia para las familias chilenas y, al mismo tiempo, un enorme desafío para seguir trabajando con fuerza desde el Ejecutivo y desde el Parlamento, para aportar los incentivos correctos que nos permitan continuar en esta senda”.